lunes, 24 de enero de 2011

SEPTIMO CAPITULO : DESDE SU CRUELDAD

                                Hola Javier..........


Te dije que no volvería a escribirte, pero me ha sentado muy mal el que des por sentado algunos aspectos de mi. No tienes ni idea de como soy y ya me dices que estas seguro que no soy esa mujer que tú buscas. Me hablas de la humildad como si fuese algo de lo que yo carezco. Y no es así para nada. Me dices que buscas algo más que un emboltorio, dando por sentado que soy una mujer superficial. Y desde luego tampoco soy una mujer superficial. También dices que crees que sea una mujer bella, y aunque este mal decirlo por mi parte te garantizo que lo soy bastante. Seguro que más de lo que  tú te crees. Pero si te puedo decir que soy una mujer segura de mi misma y feliz con mi vida, cualidades o aspectos que no tienen nada que ver contigo. Por lo que he  leído de ti, tú si pareces un hombre inseguro de ti mismo y bastante infeliz . Hablas mucho de la soledad, y eso me da que pensar porque no sé si es buscada o simplemente es la vida que te ha tocado vivir.


Hablas mucho del amor, y no creo que seas un maestro de la materia . No creo que hayas amado más que nadie, sólo igual que muchisimas personas en tú situación. Aunque, eso sí, mala suerte con las mujeres no te ha faltado. Soy una mujer soltera, porque así lo quiero. Soy feliz con mi vida, porque es la que he escogido para mi. Tengo muchos amigos a los que quiero y desde luego me corresponden como es debido. No sé lo que es la soledad, ni quiero conocerla jamás, no por miedo, simplemente porque no cabe en mi forma de vivir la vida. Soy afortunada y así lo siento, pero tampoco me hace mejor ni peor que los demás. Creo que cada uno vive acorde a su situación, aunque en muchos casos creo que cada uno tenemos lo que nos merecemos. 



Sinceramente me das pena, por tú forma de expresar tú dolor y como te regocijas con ello. Pero desde luego no es una buena forma de ligar ir de mártir por la vida, y perdona que te lo diga tan claro, pero realmente es lo que tú me trasmites. Es más, me voy a tomar la libertad de darte un consejo, disfruta de la vida y no culpes a las mujeres por ser un infeliz, no creo que el problema radique en ellas, estoy convencida de que el problema radica en ti. Seguramente me estés tachando de cruel por mis palabras, pero soy sincera y directa, cualidades que al igual que la humildad,  están también en desuso.


A las parejas no se las busca por Internet. Qué pasa, ¿ te da miedo dar la cara y tratar con ellas en persona ?.
¿ Tan poco vales, que no eres capaz de ligar como todo el mundo lo hace y ha hecho siempre ?. ¿ O es tu grado de inseguridad y complejo tan grande que te refugias en palabras escritas y un perfil ?.No sé cuales son las respuestas ni me interesa lo más mínimo, a si que si quieres seguir mandándome cartas, las seguiré leyendo como hasta ahora. No me importa ser tú pañuelo de lágrimas, mientras no te metas más conmigo. 


Esta claro que si un día decido tener pareja, por nada en el mundo quiero un hombre tan débil e infeliz como tú. No me va el rollo de lastima y penas. Quiero un hombre positivo y feliz, que no quiera amargarme la vida con sus problemas . Y desde luego que pueda permitirle su cartera los mismos caprichos que me puedo permitir yo. Por lo que me cuentas en tú carta anterior  viajas bastante, con la diferencia de que tus viajes son de trabajo y los mios son de placer. Además no soy de Córdoba, soy de Santander, la que es de Córdoba es mi madre, así que a ver si prestas un poco más de atención cuando lees lo que te escribo.


Tan sólo te voy a pedir un favor, si decides seguir escribiéndome cartas no hagas mención de mi, no quiero estar mandándote cartas cada dos por tres. Me aburre más de lo que tú crees estar sentada aquí escribiendo a un verdadero desconocido. Y si por algún casual se te ocurre venir a Santander, no esperes que este dispuesta a tomarme ese café contigo, seguro que estaré muy ocupa y no podre atenderte. Por mucha curiosidad que tengas en saber como soy, mira, pensándolo bien, lo mismo un día decido mandarte una foto mía.


Bueno, como no tengo más que decirte, termino esta carta deseándote mucha suerte con tus andanzas amorosas y con tú vida en general Javier. 




                                             Un saludo



                                                                       Rocío




P.D. :  Ten cuidado con la ortografía, has tenido bastantes faltas ortográficas en las cartas que me has enviado hasta ahora, y eso la verdad es que no dice mucho de ti.












No hay comentarios: